Julio 22, 2016
Continúan los viajes virtuales por la cultura europea, el Palacio del Segundo Cabo: Centro para la Interpretación de las Relaciones Culturales Cuba-Europa, fue el punto de partida hacia el Museo Británico de Londres, el pasado miércoles, 20 de julio. Esta vez, el “despegue” virtual cautivó el interés de más de cien personas que recorrieron galerías y departamentos del segundo museo más visitado de Europa.
El British Museum de Londres, inaugurado en 1759, cuenta desde su fundación con una variada colección de arte antiguo que abarca esculturas, pergaminos, libros y joyas. Tales obras constituyen la esencia de la vida material de pueblos que emergieron y se desarrollaron, fundamentalmente, en las regiones de Mesopotamia, Egipto, Roma y Grecia. Como parte de la experiencia, los asistentes conocieron los toros alados de cabeza humana pertenecientes a la cultura Asiria y la Piedra Rosetta, la cual constituye el objeto revelador del lenguaje de los pueblos antiguos, y una de las piezas fundamentales y más visitadas en el museo.
Las sorprendentes metopas de los frisos del Partenón y el intercambio con el fascinante universo de las momias egipcias fueron momentos únicos durante el recorrido virtual por estos y otros tesoros. Cada uno de ellos proyecta la línea del tiempo de estos pueblos que constituyeron la cuna de la civilización universal, lo cual favoreció un diálogo ávido para el intercambio cultural.
Muchas fueron las preocupaciones y posturas que se propiciaron en el público; así como también fueron abordadas cuestiones sobre la conservación y gestión del patrimonio mundial, dado el número de amenazas y peligros a los que se encuentra expuesta la cultura a nivel mundial.
La experiencia por el extraordinario Museo Británico de Londres resulta el tercer viaje virtual realizado desde el Palacio del Segundo Cabo como parte del Proyecto de Rutas y Andares 2016. Le antecedieron el parisino el Museo del Louvre y el holandés Rijskmusem. Es importante señalar que estos andares virtuales han sido concebidos para el público de la tercera edad. No obstante, también nietos, sobrinos, hijos y amigos han acompañado a los adultos mayores a recorrer las disímiles colecciones que se exhiben en las diferentes ciudades europeas seleccionadas. Dado el aprecio del público por esta modalidad, posteriores encuentros seguirán sucediéndose para que la familia cubana transite por los grandes museos de Europa.