Julio 5, 2021
El 1 de junio de 2016 el Dr. Eusebio Leal recibió la más alta distinción nacional concedida por el Reino de Bélgica, la Orden de Leopoldo, en el grado de Caballero. El acto, celebrado en el Palacio del Segundo Cabo, estuvo presidido por el excelentísimo señor Didier Reynders, viceprimer ministro y ministro de Asuntos exteriores y europeos de ese país, quien se encontraba de visita oficial en la Isla.
En la lectura que antecede la imposición de la orden, el Sr. Reynders señaló que con ella “la nación belga se honra en reconocer la larga historia de cooperación y amistad que compartimos con la Oficina del Historiador y, muy especialmente, con su director y guía, el Doctor Leal”.
La Orden de Leopoldo fue establecida el 11 de julio de 1832 por el primer rey de los belgas, Leopoldo I (1790-1865). Leopoldo pertenecía a la casa de Sajonia-Coburgo-Gotha y, al ser viudo de la princesa Carlota Augusta de Hannover, estaba vinculado a la casa real británica.
A finales de agosto de 1830, las provincias del sur del Reino Unido de los Países Bajos se levantaron contra el dominio de la casa de Orange. Las potencias internacionales reunidas en Londres acordaron apoyar la independencia de Bélgica, a pesar de que los neerlandeses se negaban a reconocer la separación del territorio. Con el nacimiento de un nuevo estado, que proclamó como forma de gobierno una monarquía constitucional hereditaria, fue preciso la elección de una persona que asumiera el poder. Esa persona fue Leopoldo, quien juró lealtad a la constitución y se convirtió en rey el 21 de julio de 1831.
Cuando la revolución belga de 1830 proclamó la independencia de los por entonces conocidos como Países Bajos del Sur, muchos no apostaron por su pervivencia como país. Siendo un hábil diplomático y un hombre ilustrado, Leopoldo sabía que un estado-nación necesita reafirmar su identidad a través de símbolos reconocibles que afiancen la unidad política y cultural. En ese sentido, la fundación de la orden estableció un honor diplomático que los singularizaba. Para su constitución tomó referencias de otras ya existentes, como la tradición de honor francesa, que suelen tener cinco clases.
En la jerarquía de honores belgas, la Orden de Leopoldo ocupa el primer lugar. Le siguen la Orden de la Corona y la Orden de Leopoldo II. Las órdenes nacionales belgas se conceden por Decreto Real. Esta, en especial, es una condecoración al mérito civil y militar, con cinco clases (Gran cordón, Gran oficial, Comendador, Oficial y Caballero) y tres divisiones (civil, militar, marítima). Se le identifica con el color púrpura claro. Recompensa a ciudadanos belgas o a personalidades extranjeras del sector civil que hayan ofrecido inestimables servicios o contribuciones al Estado belga o a su sociedad, o a los militares que hayan realizado excepcionales muestras de valentía en el cumplimiento de sus funciones. Es un reconocimiento, además, que premia las largas trayectorias en el ejercicio profesional.
La Orden de Leopoldo le fue conferida a Leal por el Decreto de su majestad Felipe de los Belgas. En la ceremonia de entrega, Canciller del Reino enfatizó sus méritos excepcionales y la cooperación entre su gobierno y la Oficina del Historiador, presente en la restauración de inmuebles como el Museo del Chocolate, en proyectos de formación profesional y de viviendas, y en otros que establecen lazos culturales entre ambos países como Vitrina de Valonia y el propio Palacio del Segundo Cabo.
La insignia de la orden es una Cruz de Malta esmaltada en blanco, en plata para la clase Caballero y en oro para las superiores. Entre las puntas de la cruz tiene hojas de laurel y de roble. El disco central muestra un león sobre un fondo de esmalte negro rodeado de un anillo de esmalte rojo con el lema de la orden: L’union fait la forcé Eendracht maakt macht, que en francés y en neerlandés significan “La unión hace la fuerza”. La cruz está rematada por una corona; puede tener espadas cruzadas o anclas debajo de ella, en caso de ser de la división militar o marítima, en tanto la civil no tiene ningún motivo distintivo. En el reverso del disco central se encuentra el monograma LR (Leopoldus Rex, es decir, Para el rey Leopoldo I).