¿Quién fue Gabriela Menéndez?

Septiembre 29, 2023

En Cuba, no fue hasta la década de 1920 cuando las primeras mujeres ingresaron a la universidad para realizar estudios superiores de arquitectura. A partir de los años 30 del siglo pasado, esta presencia aumentó y para 1952 había 130 alumnas matriculadas en la Escuela de Arquitectura; esa fue la cifra más alta de toda la República.

Por tal motivo, el número de féminas en posiciones de liderazgo experimentó un notable crecimiento. En este contexto, existió un grupo de arquitectas que se destacó por su trabajo, tanto en los colegios de arquitectos como en las dependencias del Ministerio de Obras Pública e incluso, por su labor constructiva individual.

Una de ellas fue Gabriela Josefina Menéndez García – Beltrán. Nacida en Cuba, realizó estudios en el prestigioso colegio bilingüe Ruston Academy de La Habana, así como en el College of Mount Saint Vincent de la ciudad de Nueva York entre los años 1935 y 1937. Para 1941 se graduó como arquitecta en la Universidad de La Habana.

Durante su época universitaria conoció a Nicolás Arroyo Márquez. Al igual que Gabriela, Nicolás estudiaba la carrera de Arquitectura y con posterioridad, fue Ministro de Obras Públicas y el primer Presidente de la Junta Nacional de Planificación. Ambos se casaron en diciembre de 1942.

Luego de su matrimonio, formaron el estudio de arquitectura Arroyo-Menéndez y considerado como “uno de los más prestigiosos de la República” [1]. Este binomio creativo impulsó los estilos de la modernidad arquitectónica en las construcciones cubanas. La pareja vivió en una casa-estudio construida por ellos en 5ta avenida, Miramar. El inmueble es un fiel reflejo de la admiración de la pareja por las concepciones estéticas de Frank Lloyd Wright y Le Corbursier.

Según la historiadora Florencia Peñate Díaz, en las obras que realizó la firma constructora, tanto el nombre de Gabriela como el de su esposo aparecían juntos. La profesora universitaria también afirma que Gabriela era reconocida por ser una mujer inteligente y, de hecho, fue ella quien lideró Arroyo-Menéndez cuando su esposo ocupó otras funciones durante el gobierno de Fulgencio Batista (1952-1958) [1].

En 1946, Gabriela llevó a cabo su primer proyecto de un edificio dúplex, ubicado en la intersección de la calle Espada nos. 5 y 7 esquina a Infanta, Centro Habana. Este proyecto incorporó el color en la fachada a través del revestimiento con teselas, convirtiéndolo en un elemento destacado. A medida que avanzaba la década de 1950, el estudio de arquitectura Arroyo-Menéndez realizó otras obras notables, entre las que se encuentra la construcción de la Ciudad Deportiva, un complejo deportivo circular diseñado para albergar a 15 000 personas aproximadamente. Tony Perrottet describió la edificación como “una arena circular cubierta cuyo diseño de la época se parecía a un platillo volante blanco” [2].

De conjunto con Welton Becket & Associates, la firma arquitectónica cubana trabajó en el proyecto del Hotel Habana Hilton, actual Habana Libre e inaugurado por Fulgencio Batista en 1958. Además, se destaca el Teatro Nacional, ubicado en el municipio de Plaza de la Revolución y concluido después de 1959; una edificación señalada por su modernidad, belleza y funcionalidad.

Sin embargo, el legado de la pareja trasciende sus edificaciones. Ambos participaron en el Grupo Técnico de Estudios Contemporáneos (Agrupación Técnica de Estudios Contemporáneos, ATEC), que llevó a la incorporación de Cuba en el Congreso Internacional de Arquitectura Moderna (CIAM). Según el arquitecto Nicolás Quintana, la influencia de Gabriela Menéndez sobre su esposo, Nicolás Arroyo fue decisiva para lograr incluir “a Cuba en el mapa del CIAM” [3]. Estas afirmaciones representan un reconocimiento significativo para una mujer que trazó su trayectoria profesional en un campo dominado, en su mayoría, por hombres.

Para el año de 1958 la pareja partió hacia Estados Unidos, cuando Nicolás Arroyo fue designado como embajador en Washington. Allá, el matrimonio continuó el ejercicio de la arquitectura, tanto para proyectos residenciales como comerciales. Ambos fallecieron en el 2008.

Notas:

[1] Díaz, F. P. (2012). La obra de las arquitectas cubanas de la República entre los años 40 y fines de los 50 del siglo XX. Arquitectura y urbanismo, vol. XXXIII, no 3, septiembre-diciembre , 70-82.

[2] Perrottet, T. (2019). Cuba Libre!: Che, Fidel, and the Improbable Revolution That Changed World History. Nueva York: Blue Rider Press.

[3] Isla, W. C. (26 de Julio de 2008). Falleció Nicolás Arroyo, pionero del modernismo cubano. Recuperado el 28 de Septiembre de 2023, de El Nuevo Herald: https://www.elnuevoherald.com/ultimas-noticias/article1934191.html

Acta del jurado

Acta del jurado. VIII edición del concurso infantil Dibujando Europa: La arquitectura cubana y europea

Acta del jurado

Mayo 9, 2023

 

Premiación de la VIII edición del concurso infantil Dibujando Europa, organizado por el Centro para la Interpretación de las Relaciones Culturales Cuba-Europa: Palacio del Segundo Cabo, de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, y la Delegación de la Unión Europea en Cuba, con el tema La arquitectura cubana y europea.

En deliberación del día jueves 27 de abril de 2023 a las 13:00 horas, el jurado integrado por:

  • Sergio Pérez Martín, oficial de la Delegación de la Unión Europea en Cuba
  • Adriana Díaz Pérez, líder del proyecto infantil Golden Kids
  • Alexander Calcines Makeichik, artista visual
  • Sofía Verdés Méndez, especialista del programa social infantil de la Dirección de Gestión Cultural
  • Amanda Ramírez Viñas, especialista principal del Centro para la Interpretación de las Relaciones Culturales Cuba-Europa: Palacio del Segundo Cabo

Ha determinado los siguientes premios:

En la categoría de 5 a 8 años

El 1er premio se otorga a Ian Lucas Arjona Cárdenas, 7 años, por su dibujo La torre de Pisa y la Iglesia Parroquial de Guanabacoa.

Por la composición y la manera con la que aludió a la arquitectura cubana y la europea, desde una visión creativa de la fraternidad entre Cuba e Italia.

Se otorga el 2do premio a Dunaidy Torres Pérez, 8 años, con su dibujo de la Torre de Pisa y el Castillo de los Tres Reyes del Morro.

Por la creatividad de la composición, la síntesis alcanzada en las formas representadas y la riqueza visual de los colores.

El 3er premio se otorga a Jaime Herrera Monzón, 8 años, con su dibujo Tradiciones

Por la calidad del dibujo y el gran dominio de las técnicas empleadas, entre las que se encuentra el scratchboard.

En la categoría de 9 a 12 años

El 1er premio se otorga a Karla Alejandra Regalado Martínez, 12 años, por sus obras Mirada a Europa desde la sede cubana e Influencias

Por la excelente calidad técnica y compositiva de sus dos obras, donde es llamativo el uso de la perspectiva y la relación, sutil pero muy fuerte, entre Cuba y Europa a través de la arquitectura colonial y la incorporación de las respectivas banderas como elementos distintivos de identidad cultural.

El 2do premio se otorga a Lauren Jackson López Lau, 12 años,

Por la creatividad compositiva en la representación de los vínculos culturales entre Cuba y Europa y por el dominio de la técnica empleada, donde adquiere importancia el uso de la línea y el color que delimitan y diferencian los monumentos, el fondo y los primeros planos.

El 3er premio se otorga a Zamira Alejandra Díaz Santos, 11 años, por su dibujo Arte moderno y sus maravillas

Por el dominio de los valores con el empleo del claroscuro y de la creatividad de la composición, donde priman las diferentes perspectivas que muestran diversos elementos que se desintegran, pero al mismo tiempo se integran y logran una composición armónica.

 

Además, el jurado decidió otorgar las siguientes Menciones Especiales:

Categoría de 5 a 8 años

Angélica Valdés Fuentes, 8 años / El Capitolio de La Habana y la Torre Eiffel

Camilo Gómez Hernández, 8 años / La lámpara y La Habana Vieja

Niñas y niños de la Escuela Francesa de La Habana, 5 años / La ciudad más linda del mundo

Categoría de 9 a 12 años

Brandon Díaz Ocaña, 12 años / La noche de Irlanda en Cuba

Diego Yoah Mesa Leyva, 10 años / Raíces

Samary Fernández Santos, 11 años / Mundos cercanos

Setareh Babazadeh, 11 años / Balcón habanero

Nicolas Oppmann, 9 años / Tipical Havana house

 

Los miembros del jurado felicitan a todas las niñas y niños participantes por su creatividad y el esfuerzo realizado. También destacamos el apoyo de las familias y de los profesores en los diferentes talleres de artes plásticas que, con su trabajo, contribuyen a la formación y sensibilidad artística desde las edades tempranas. Les exhortamos a seguir trabajando en las próximas ediciones del concurso infantil Dibujando Europa y, desde el arte y la cultura, continuar creando lazos fraternos entre las naciones.

dest Nuevas tendencias museológicas en el Palacio del Segundo Cabo

Nuevas tendencias museológicas en el Palacio del Segundo Cabo

Nuevas tendencias museológicas en el Palacio del Segundo Cabo

Desde la apertura de sus salas permanentes el 9 de mayo de 2017, el Palacio del Segundo Cabo se ha convertido en un sitio de referencia en la práctica museológica contemporánea en Cuba. La clave de su éxito se debe a la implementación de las nuevas tecnologías en función de mejorar la comunicación con sus públicos, a fin de explicar las relaciones de Cuba y Europa durante cinco siglos; lo que nos acerca, nos diferencia, lo que la Isla ha aportado al mundo.

No se parece a ninguna otra institución museal, pues en su momento de concepción y materialización no existía un referente nacional que sirviera de modelo. La libertad de crear a partir de cero permitió hallar soluciones novedosas y de integrar criterios a la museología coherentes con el tipo de institución que se ambicionaba y en consonancia con los principios de las nuevas tendencias museológicas.

Varias aristas complejizaron la propuesta. Uno de los mayores desafíos fue la conceptualización de una relación intensa y prolongada histórica y geográficamente entre Cuba y Europa, así como decidir los mensajes más relevantes a transmitir; otro fue concebir una museografía participativa que asumiera a los espectadores como sujetos activos y que promoviera interacciones más amplias —el público como consumidor y emisor—, procurando un fácil acceso de todos los individuos.

Una práctica definitoria que ha marcado el centro es explicar y contextualizar los contenidos por medio de mensajes breves, atractivos y provocadores, a fin de que el visitante comprenda las circunstancias culturales, sociales, económicas y políticas que han marcado cada período histórico, la manera de pensar de los individuos, la identidad en evolución de las culturas. En tanto se potenciaba una comunicación persuasiva y se reivindicaba una perspectiva democrática y descentralizadora con respecto al rol del usuario, la museografía se aleja de los tradicionales sistemas expositivos e incorpora módulos participativos —entre los cuales se encuentran mesas multitáctiles, quioscos y un área con sensor de movimiento propicio para la danza, para los cuales se han desarrollado aplicaciones didácticas—, audiovisuales, multimedias, escenografías, recursos gráficos, cajas de luces, fotografías, módulos de sonido (trompetas) y dispositivos táctiles, que motivan a conocer más por el tema en cuestión.

Las nuevas tecnologías son un medio eficiente para aproximar al visitante a los contenidos que se desea dar a conocer, ya sean testimonios de viajeros, libros, personalidades influyentes en el pensamiento social y científico de una época, matrices modélicas que delinearon la arquitectura de La Habana, cartografía sobre Cuba realizada entre los siglos XVI y XIX, ritmos danzarios o géneros musicales. Las soluciones tecnológicas aplicadas viabilizan propuestas que emplean el sonido, la imagen —fija o en movimiento—, el tacto y el movimiento corporal para favorecer las conexiones entre los usuarios y la exposición permanente. Continuamente se invita a realizar una actividad gratificante y a intervenir en dinámicas colectivas, lo cual contribuye al intercambio con otras personas y a hacer de su visita un acontecimiento excepcional.

En cada sala el público encuentra diferentes maneras de relacionarse con los medios tecnológicos y los softwares que permiten su funcionamiento; en todos los casos responden a requerimientos específicos de sus contenidos y a los mensajes relevantes seleccionados. La museografía del Palacio se ha concebido abierta, de manera que pueda modificarse y enriquecerse con nuevos contenidos según sea posible, lo cual permite una actualización constante del discurso. Estos pueden reajustarse de acuerdo a los criterios museológicos que se manejen, siempre que se apueste por integrar nuevos ángulos, nuevas percepciones o que se precise de un lenguaje específico para un tipo de público que así lo demande.