Agosto 26, 2022
La Orden del Santísimo Salvador de Santa Brígida de Suecia, también conocida como Orden Brigidina, fue fundada en Suecia por santa Brígida y aprobada por el papa Urbano V en 1370. Esta religiosa sueca es la santa patrona de Suecia y una de los patronos del continente europeo.
Durante la Edad Media, la orden tuvo gran influencia hasta que, con la reforma protestante, fue decreciendo. Sus miembros son observantes de la regla de San Agustín. Llevan una vida de estudio y oración que se basa en la pasión de Jesucristo y en alabanzas a la Virgen María. Posponen a sus nombres las siglas O.SS.S. y portan un característico hábito gris.
Refundada en 1911 por santa Elizabeth Hesselblad, la orden inició una reforma que dio origen a una rama centralizada bajo el gobierno de una abadesa general que se mantiene hasta la actualidad. Cuenta con unas 600 hermanas de diferentes nacionalidades y 52 casas religiosas en distintos países del mundo, entre estas, una en Habana Vieja.
La presencia de esta congregación religiosa católica femenina en la parte más antigua de la capital cubana es el resultado de la relación cordial que se estableció entre la abadesa general de la orden, la Madre Tekla Famiglietti, y el líder de la Revolución cubana, Fidel Castro. Para ello también fue necesario la anuencia del Vaticano. El inmueble seleccionado para la orden, un antiguo convento, fue restaurado por la Oficina del Historiador de la ciudad de La Habana bajo la dirección personal de Eusebio Leal Spengler.
En una ceremonia espiritual realizada en la sede de las Brigidinas, en el Centro Histórico habanero, la Madre Tekla invistió a Leal Spengler con la Cruz Ecuménica con la Estrella de Comendador de Santa Brígida, su más alta distinción, en reconocimiento al impulso de altos ideales de diálogo y paz promovidos por la única santa sueca, fundadora de la orden.