Diciembre 15, 2021
El patrimonio del mercurio es una declaratoria conjunta de los pueblos de Almadén e Idria, en España y Eslovenia, respectivamente. En ambos pueblos se encuentran dos de las mayores minas de mercurio del mundo explotadas desde hace siglos.
Estos pueblos presentaron la candidatura a la Unesco bajo el nombre Patrimonio del Mercurio Idria y Almadén. En 2012, la Unesco reconoció su carácter histórico e hizo oficial la declaratoria.
Las minas destacan tanto por su historia como por los bienes culturales y arquitectónicos que presenta. En Almadén, España, se ha extraído el mercurio desde la Antigüedad; mientras que en Idria, Eslovenia, se halló este mineral por primera vez en 1490. Son dos ejemplos de pueblo minero que evidencia el avance industrial, urbano y social que tuvieron a lo largo de la historia.
Las minas de Almadén, enclavadas en la provincia de Ciudad Real, en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, poseen una importantísima cantidad de cinabrio, mineral del que se extrae el mercurio. Se conoce que en tiempos de Vitrubio y Plinio ya estas minas eran explotadas. En la región de Almadén, se encuentran el Castillo de Retamar, la Casa Academia de Minas y el Real Hospital de Mineros de San Rafael, todos relacionados con su parque minero.
Las minas de Idria fueron durante mucho tiempo las segundas productoras mundiales de mercurio, por detrás de Almadén, y constituye uno de los escasos lugares en el planeta donde el mercurio se encuentra tanto en estado líquido como en sulfuro.
Idria fue importante para la extracción de plata en la América hispana, junto con las minas de mercurio de Huancavelica, en Perú, y Almadén. Estos fueron los principales lugares de los que se surtían las minas argentíferas del Nuevo Mundo. Idria proporcionaba el 2,32% de los 370 mil kilos de mercurio consumidos anualmente en América hasta el siglo XVIII.
Destaca en esta región de Eslovenia la entrada subterránea de la mina, llamada el Pozo de Antonio (Antonijev rov), la cual se utiliza hoy en día para las visitas turísticas de los niveles superiores. Los inferiores se encuentran clausurados y llegan hasta los 400 m de profundidad.
Las minas de Almadén e Idria son un testimonio del comercio intercontinental del mercurio, que generó importantes intercambios entre Europa y América durante siglos.
