Diciembre 8, 2021
El conjunto del Castillo de Mir, situado en Bielorrusia, fue declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad en el año 2000. Está considerado el primer sitio del patrimonio de la Unesco en la Bielorrusia independiente.
Los orígenes del Castillo de Mir se remontan al siglo XV y se comenzó a construir en estilo gótico. Presenta una planta cuadrada con cuatro torreones en las esquinas y muros gruesos de piedra. Todas las torres del castillo tienen la misma estructura, pero diferentes decoraciones, lo cual las hace únicas.
Con el tiempo, se le añadieron otros espacios que fueron construidos en estilo renacentista y barroco. Después de ser abandonado durante casi un siglo y de haber sufrido numerosos daños durante el período napoleónico, el castillo fue restaurado a finales del siglo XIX y se le incorporaron nuevos elementos que transformaron el área circundante en un parque. Durante la Segunda Guerra Mundial pasó a manos de la ocupación nazi y sirvió como gueto para la población judía local.
Además del edificio principal, el complejo del castillo incluye el santuario de Svyatopolk-Mirski, la capilla de Zaslauski, un estanque y el parque. En la actualidad, pueden visitarse más de veinte salas de exposiciones diferentes, entre las que se incluyen el salón de armas, la cervecería, el gueto, la caza y la sala de cetrería.
La Unesco lo declaró testimonio vivo de una turbulenta historia en el que se congregan elementos góticos, barrocos y renacentistas.
